viernes, 5 de septiembre de 2014

La cosa

La cosa es volver a amarme.
la cosa es poder hacerlo
la cosa es que sea como antes
la cosa es intentar de nuevo
He tratado hasta el cansancio hallar la forma
he querido una y otra vez llegar adentro
he perdido muchas veces el camino
he dejado mil pedazos en cada intento
Pues la cosa entonces ...
se transforma en un asunto
que nada tiene de amor, solo de intentos
y tal vez la cosa sea solo aceptarme 
y cambiar el relato de este cuento.

domingo, 24 de agosto de 2014

El anillo de plata

El anillo de plata



El Anillo de plata.

Villa Carlos Paz, yo tenía 14 años recién cumplidos, ella 12. Una muñeca de ojos marrones y una ternura tan poco habitual que para conquistar mi corazón le llevó unos 14 segundos.
Interminables paseos hasta la placita “Belgrano” y charlas acerca de las cosas “importantes” de la vida poblaban nuestros momentos. En dichos paseos, me di cuenta con qué facilidad se me acalambraba la mandíbula cuando intentaba decir “me gustas” o “querés ser mi novia?” pero había remado bastante para llegar a esta posición (cosa a la que debía acostumbrarme para el resto de mi vida ya que no soy precisamente un agraciado por la diosa afrodita) y hacía unos días ella había confirmado nuestro noviazgo, pero “sin beso en la boca”.

Entonces me pareció buena la oportunidad para “ESE” regalo, el que marcaría su vida y sellaría mi amor para siempre.
Guau! Impresionarla de manera imborrable. ¡Que buena idea! Que pasen 25 años y aun mi imagen intacta como detrás de un cristal, un recuerdo imborrable para ella.
Entonces traté de ahorrar lo más posible del dinero que me entregaba mi padre para ir a la escuela que quedaba a unos 65 km de mi casa , a ella viajaba los lunes y regresaba los viernes, por lo tanto me daban para el pasaje y yo me volvía a dedo o me iba a dedo para juntar dinero para el fin de semana, con ese dinero ahorrado me compraba un “Mantecol” gigante, que devoraba sin piedad.
Pero ahora el ahorro tendría un mejor fin, ya que hacía unos días era un hombre comprometido.
Busqué en los locales del centro de mi ciudad, uno por uno, algo especial, original y que perdure en la eternidad, que impacte, que deslumbre pero por sobre todo que le guste.

Me alcanzó para un anillo. Pero era de plata!

Fuimos una vez más a esa plaza y ensayaba una y otra vez, como a un speach de venta la frase que perduraría, la repetía todo el camino mentalmente mientras ella me hablaba de sus estudios, del deporte y qué se yo cuantas cosas que obviamente asentía sin escuchar, porque repetía “esa” frase sin parar en mi cabeza.

Y llegó el momento esperado, junté fuerzas y habiéndonos sentado en una pirca de la plaza, sin titubear y mirándola a los ojos, muriéndome de amor, con las palmas de las manos transpiradas saqué el anillo y le dije. -- Esto es para vos, te lo compré para que lo uses todo el tiempo y te lo saques el día que dejes de amarme--.

Una frase más que elaborada para un nene de 14 años, un éxito, impresionante, seguramente la impacté de por vida.

Nunca se lo puso.

Entonces pasaron los años, amé a esa mujer como a nadie y atravesamos por un largo noviazgo de 11 años, 11 años de crecer juntos, toda la adolescencia y parte de mi etapa universitaria, una gran historia  que terminó con un gran dolor cuando a 8 meses de nuestro casamiento rompió conmigo, y en la misma fecha elegida para nuestra unión se casó con otra persona.

Estuvo mi vida, a partir de ese momento, poblada de decisiones que me fueron alejando de ese gran dolor, desde salir a todos lados con mujeres a quienes agradezco infinitamente su aporte de afecto 
pero que no lograban mitigar ese dolor, hasta llegar a mudarme de ciudad para alejarme de nuestras amistades ya que todas me la recordaban.

Nunca más la vi.

Pasaron los años y desarrollé mi profesión, conociendo a la mujer que hoy es mi esposa con la que tuve dos hermosas hijas y una buena vida poblada de buenos momentos.

A mis 40 y pico, en uno de mis viajes de visita a mis padres en la Villa, fui a casa de Nora con mis hijas, una amiga entrañable que hacía tiempo que no veía, así que la alegría del encuentro hizo que no notara que detrás de una planta y media escondida, coincidiendo en el lugar y el momento estaba ella, si ella!… se me detuvo el corazón, no sabía cómo me saludaría!

Esta mujer no sabía de mi amor, del dolor terrible por el que había pasado, de mi huida a otra ciudad, y con su matrimonio con cuatro hijos ya creí que mi historia a esta altura poco le importaría.

Pero me equivoqué, - Hace 10 años, tres meses y 27 días que no te veo-, fue su primera expresión acompañada por un abrazo que me hizo transpirar como aquel día, era “ese” aroma de nuevo, “ese” cuerpo, “ese” pelo, “esos” ojos… Dios!

Y fue una tarde y noche completa de recuerdos (hasta las 6 de la mañana) contándonos muchas historias y recordando viejas épocas ya con nuestra perspectiva madura. No nos alcanzaba el 
despiadado tiempo que se terminaba y me alejaba de disfrutarla nuevamente, cuando en un momento y cerca ya de despedirnos se paró, fue hasta un viejo mueble que estaba en un rincón y extrajo de él una cajita pequeña, dentro de ella, entre algodones y herrumbrado por el paso de los años estaba él, que había logrado su objetivo, perdurar en su memoria como una señal, como un recuerdo que quien la había amado tanto.

Mi anillo de plata...

… A veces pensamos que pasamos desapercibidos, pero no nos damos cuenta que dejamos marcas, marcas imborrables en la vida de algunas personas, marcas de afectos que le pueden servir a ella a sobrellevar momentos difíciles solamente pensando en el amor que le regalamos.

Por eso no dejemos de dar amor.


martes, 15 de julio de 2014

Belén

No hay lluvia que lave, silencio que no hable
paseos que nublen, dolores que saben
Cielos sin dibujos, arboles que al viento
no formen tus formas, no enseñen tus males
Se confronta todo, limon con azúcar
menta con vinagre, rosas que desgarren
Que clavan espinas, se entierran sabiendo
que antes que comience quizás esto acabe
Caricias, te amo, misterios, tatuajes
historias, y mimos, mentiras salvajes
Que solo endurecen, que no sanan, abren
heridas profundas, desgarran cortantes
Caricias vacias quedan de este mal cuento
recuerdos tan tiernos que hierven mi carne
Pero no me estanco, camino a otra historia
que llene mi alma sin sabor a sangre.

El beso

Buscando el lugar
para ese beso furtivo
detente aqui un momento
nadie mira, hace frío
aprieto tu cuerpo, lo siento tan cerca...
y tomo tu cara, tu perfume, el mío
Me acercas tu boca
te tomo me tomas
te apropias de mi alma
te juegas me juego
sabemos que no
que eso no debemos
pero esto es más fuerte
de lo que creemos.
Tomar el coraje?
dejar nuestra vida?
El precio es muy alto
no te atreverías
Y mientras vivimos
los breves momentos
sudores, pasiones
y breves encuentros.

Mentiras Piadosas

Te olvidaste un par de cositas
un aro, tu regalo abierto
tu aroma, tu corazón y tu perfume en mi cuerpo...
Ah! Y te llevaste otras
mi corazón, mis silencios
mis caricias, besos tiernos y la ilusión de otro encuentro.
Pero sabes?
Aún estoy entero, ya nada me toca
tus palabras resbalan, tu recuerdo no daña
tu imagen se siente
pero no se extraña
Y percibo la angustia
de tu espera incierta
y creo en milagros que ya no te esperan
Camino sintiendo
el tiempo perdido
palabras al aire, sentimientos fríos
Te rodeé de afecto
te brindé cariño
tal vez la ternura tomé por camino
Pero tu solo sexo
ninguna otra cosa
y para obtenerlo... "mentiras piadosas"

Invitación

Te voy a pensar un ratito, me doy permiso.
porque me lo merezco, por mi sacrificio.
Aunque sienta en el pecho un dolorcito
aunque mi mano tiemble cuando escribo
Una plegaria a la vida para que no te instales
en mis sueños, en mis bienes, en mis males
Un ruego a que dejes espacio, que te salgas
que no quieras mas, que no lo valgas
Es un suplicio siquiera imaginarte
te invito por favor a retirarte.

Naty

Cupido vino hacia mi puerta, para mí se equivocó
venía corriendo por algo y sin querer, tropezó.

Tenía el arco alistado para el disparo certero
se enredó con tanta túnica y cayó de boca al suelo

Su arco en la mano presto, se disparó hacia mi, derecho
No hice tiempo a correrme para que diera en el techo

Y yo con la puerta abierta esperando la comida
me dio el tiro en el pecho, quede mirando hacia arriba.

Y apareció tu carita, con esa sonrisa plena
ese aura que de vos sale y esa luz que hasta me ciega

Creí que estaba en el cielo creí que me había muerto
pero note que esa sonrisa venía pegada a un cuerpo !

Pero no es que los ángeles vuelan entre nubes bellas?
envueltos en mantos blancos, no es que ya son estrellas?

Pero este angel me mira,me habla, sigue sonriendo,
me abraza, me besa, ríe, y clava mi flecha en su pecho!

Y ahora estamos unidos...una fuerza misteriosa
será cupido equivocado o será alguna otra cosa?

Sombras

Que bueno que estés aquí
cuando las sombras de mi vida comienzan a estirarse
cuando cuesta mirarme al espejo
cuando parezco ya a mi padre
Que bueno que estés aquí
cuando aún lucho por ser alguien
aún redoblando el esfuerzo
para llegar a alcanzarme
Y que bueno que te quedes
sin condiciones, sin antes
queriendo mi historia y siendo
mientras relato una parte
protagonista en tus ojos
como si hubieras vivido
a través de mis miradas
lo que cuento, lo que digo
Que bueno que estés aqui
desearía que te quedes
que no te apartes, no salgas
y me permitas quererte.